Seguro que si estás leyendo estas líneas es porque estás planeando tu estancia en Koyasan. Este pequeño y alejado poblado ha sido de lo que más nos ha sorprendido dentro de todo lo que ver en Japón de nuestro recorrido. Sobre todo porque vives una experiencia única que no vas a poder experimentar en ninguna otra parte del mundo. A continuación te contamos lo que aprendimos de Koyasan, cómo llegar y nuestra experiencia en el Ryokan o Shukubo de los monjes.
Koyasan, Japón
Koyasan se encuentra en la prefectura de Wayakama, al sur de Osaka. A aproximadamente 900 metros sobre el nivel del mar, con lo que es bastante fresco. Sobre todo de noche. El pueblo es pequeño, se puede recorrer perfectamente a pie. Son unos 3 km de norte a sur y 6 kilómetros de este a oeste. Supuestamente el monte de Koyasan tiene una topografía que se asemeja a la de una flor de loto de ocho pétalos.
Fue en Koyasan donde el gran monje budista Kobo Daishi Kukai estableció un centro de estudio y práctica budista hace más de 12 siglos. El deseo de Kobo Daishi era que estuviera lo más alejado posible de las distracciones de las ciudades. Y, de esta manera, poder centrarse en la práctica del budismo. La fe en Kobo Daishi ha perdurado durante muchos años, atrayendo a Koyasan peregrinos durante más de mil años. Además, en el año 2004 Koyasan fue declarado por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad.
Cómo llegar a Koyasan. World Heritage ticket
Si quieres llegar a Koyasan con tu JR Pass no será posible, ya que la compañía de trenes que hace este trayecto no pertenece a JR (Nankai). Para llegar a Koyasan con el JR Pass desde cualquier ciudad de Japón es recomendable siempre pasar por Osaka. Aquí debes coger la Loop Line o línea circular hasta la estación Shin-Imamiya. Así podrás aprovechar al máximo tu JR Pass. Una vez en Shin-Imamiya deberás dirigirte al mostrador de la compañía Nankai y comprar tus tickets de ida y vuelta. El precio del ticket incluyendo trayecto en tren + cable car + bus de la estación de Koyasan hasta el pueblo es de unos 23€ por persona. El recorrido desde Osaka son casi 4 horas, pero el camino es muy bonito y el destino final también.
Si vas a alojarte en Koyasan, asegúrate de que el vendedor de Nankai te reserve el ticket de bus ilimitado dentro del pueblo de Koyasan y para llegar a la estación durante 2 días. Por favor, cuando llegues también revisa con el hotel el horario de los autobuses para volver a la estación al día siguiente, ya que no hay mucha frecuencia de autobuses. Así te evitarás esperar 1 hora en la parada.
Estancia en Koyasan. Dormir en un Shukubo o templo budista
¿Qué es un Shukubo? Un Shukubo es un Ryokan o alojamiento tradicional japonés, pero experimentando de cerca las prácticas budistas. Igualmente, en un Shukubo podrás probar la cocina vegetariana de los monjes. Esto es, sin carne ni pescado. Nuestra estancia en Koyasan fue en el Shukubo Jokiin en media pensión (cena y desayuno). Existen más de 50 Shukubos en Koyasan y la verdad es que la experiencia en el Jokiin fue muy buena. Además, se encuentra cerca de la parada de bus y de los templos. La cena te la llevan a tu habitación entre las 17:30 y las 18:00 y a las 22:00 se cierran las puertas del templo. Tampoco es que haya mucha vida nocturna y viene bien para poder madrugar al día siguiente y ver cómo meditan y rezan.
La cena estaba deliciosa y fue bastante contundente, lo que a las 22:30 teníamos hambre de nuevo y ya no podíamos salir. Por tanto, llévate algo para comer a la habitación. Hay un Wall Mart cerca, así que por eso no te preocupes. Nosotros por suerte teníamos algunas municiones en la maleta para “sobrevivir”.
De la misma manera, si quieres ver cómo rezan en el templo Jokiin, a las 6:00 de la mañana y durante unos 30 minutos podrás atender a su ceremonia. Una experiencia única. El desayuno es a las 7:30 en una sala común junto al resto de huéspedes. También bastante abundante. Por lo que respecta a la cama, debes saber que está en el suelo, es decir, un auténtico tatami. No te preocupes, ya que es super cómodo. Consulta aquí todos los shukubos y alojamientos de Koyasan.
Cocina vegetariana budista (Shojin Ryori)
En la religión budista, matar una vida consciente es inmoral, por ello son vegetarianos. El Shojin Ryori o cocina vegetariana budista tiene sus orígenes en China, pero los monjes japoneses lo han adaptado con el paso de los años. Según las enseñanzas budistas, el Shojin Ryori es 100% vegetariano y se cimienta en 5 sabores, 5 tipos de cocción y 5 colores. Es decir, todas sus comidas deben incluir un plato a la parrilla, uno frito, uno en vinagre, un plato de tofu y uno de sopa. En el Jokiin podrás degustar esta cocina original algo más elaborada.
Igualmente, dentro de tu habitación encontrarás un yukata o kimono tradicional japonés. Supuestamente es para ponértelo para ir a darte un baño a sus aguas termales o estar en tu habitación. Eso sí, en los baños las mujeres van por un lado y los hombres por otro. Por lo que puedes leer, son experiencias totalmente únicas y, seguramente las más memorables con el paso de los años.
El trato en general en este hotel de Koyasan (por así llamarlo) fue muy bueno. Las instalaciones estaban limpias y en buen estado. Por lo que respecta a los dormitorios, son privados, pero el baño es compartido (muy limpio y apenas coincidías con nadie). En las habitaciones hay buena conexión WIFI, calefacción y aire acondicionado. De bienvenida te dan un pastelito y té. Eso sí, las paredes son de papel (tal cual). Lleva tapones si te cuesta dormir en cualquier sitio y antifaz para la luz si no tienes pensado levantarte a ver los rezos.
Qué ver y hacer en Koyasan
A continuación te detallamos qué visitar en Koyasan.
1º. Recorrer el cementerio Okunoin, Patrimonio de la Humanidad
El acceso es gratuito y desde el hotel hasta el mausoleo de Kobo Daishi es aproximadamente 1 hora y media a pie por trayecto. No obstante, también puedes usar el servicio de autobuses incluido en el ticket de Nankai. El cementerio Okunoin y el área sagrada se extiende unos 2 kilómetros. Es un sitio único en el mundo, rodeado de cedros centenarios y ni más ni menos que 200.000 lápidas y págodas conmemorativas.
2º Mausoleo Kobo Daishi Gobyo y Torodo (Sala de los Faroles).
El Mausoleo es el centro del budismo de Koyasan. El entorno es espectacular y difícilmente de expresar con palabras. Como no está permitido sacar fotos, dejamos que lo descubras por ti mismo. Junto a él se encuentra la sala de los faroles, esto es, una capilla de oración frente al mausoleo.
3º. Visitar los templos principales.
En Koyasan existen 117 templos, de los cuales 52 ofrecen alojamiento. Aquí debes visitar el complejo Danjo Garan y la Gran Pagoda Konpon Daito. Ambos a pocos metros del templo Jokiin. Ojo, cierra a las 16:30 y hay que pagar 200 yenes para entrar.
4ª. Daimon, atardecer y senderos.
Pasada la Gran Pagoda en dirección contraria de vuelta al hotel, a unos 100 metros siguiendo la carretera llegaremos a Daimon, la puerta principal de Koyasan. Desde aquí podrás ver un bonito atardecer y descubrir los senderos de Koyasan. La puerta en sí es bonita y se queda iluminada por la noche. Ojo, cuando fuimos nosotros en los senderos colindantes, ¡vimos avisos de precaución por presencia de osos!
Y esto consideramos que es todo lo que debes visitar en Koyasan. Dale un vistazo también a nuestro artículo sobre qué ver en Japón en 14 días para conocer todo el itinerario que hicimos por el país nipón. Si tuvieras cualquier duda, puedes dejarnos un comentario, estaremos encantados de ayudarte. Finalmente, si aún no tienes tu seguro de viaje, aprovéchate del 5% de descuento que te da IATI por ser nuestro lector. Solo tienes que reservar a través de la siguiente foto.
¡Hola! Soy Ruth, canaria con alma viajera. Con formación y experiencia en el sector del turismo y marketing digital. En este blog te cuento todos los consejos que necesitas para conocer el lado más auténtico de Gran Canaria por tu cuenta. También te comparto mis guías de viaje de todos los lugares del mundo que voy visitando para que puedas descubrir los destinos como un local y ahorrar tiempo en la planificación. Además de viajar, me encanta la gastronomía y el deporte. Hago carrera y senderismo de montaña con mis «perri-hijos» (Silver y Plata). En todas estas aventuras me acompaña mi pareja, Jorge, que también verás mucho en este blog.